domingo, 4 de abril de 2010

No existe mayor amigo que el silencio. Es el único amigo que nos guardará nuestros secretos.

No existe mayor amigo que el silencio. Es el único amigo que nos guardará nuestros secretos.

Pero, también es uno de los mejores amigos de la sabiduría e inteligencia. Dentro de las prácticas místicas tanto de oriente como occidente, en los grados superiores, se enseñan las prácticas del silencio.

En oriente se le conoce como Mauni.

Los monjes católicos, taoístas, zen, tibetanos, yogas, lo practican. Algunos monjes lo practican por muchos años. Existen templos en donde la característica principal es el silencio. Los monjes, hacen todas sus actividades cotidianas en silencio por varios años.

Para los niños es una excelente práctica que los disciplinará y ayudará en su formación integral.

Si se hace la práctica por algunas horas, se activarán ciertos mecanismos de la energía interior que traerán paz, control, paciencia, observación, sabiduría e inteligencia,adicionalmente a formarse en la reflexión natural y el fluir de la vida.

Muchos políticos ingresan a una “cura de silencio”, es parte de las enseñanzas del mauni.

Cuando existen las peleas de parejas, luego reina el silencio. En este silencio cada cual reflexiona, salen a flote sus fantasmas, sus contradicciones, odios, venganzas, hasta que se hace la luz.

Luego, viene la reconciliación, la unión, el armisticio, pero como un fenómeno de vasos comunicantes en donde las aguas se equilibran. Cada uno cede sus excesos y mejora sus defectos.

El silencio tiene ese poder.

Los niños cuando tienen las pataletas, explotan, lloran, se vuelven agresivos, como que liberan la parte instintiva. Luego, viene el silencio, hasta que parecen angelitos que acaban de bajar del cielo.

Por ello, puede enseñarse a los niños y por supuesto a los adultos, ha guardar silencio. Cuando los niños no obedezcan, el premio y a la vez castigo será ordenarles el silencio.

Por ejemplo, decirles que estarán en silencio por espacio de 20 minutos. Se deberá señalar el reloj que está en lo alto de la cocina o la sala para que no adelanten el reloj y cuando las manecillas terminen los 20 minutos, ellos podrán hablar.

Si lo cumplen podrán salir a jugar o se les encenderá la computadora o televisor, si no lo cumplen volverán los 20 minutos ha empezar nuevamente.

Si aprenden la técnica será una de las mayores enseñanzas que tendrán en la vida. La nueva humanidad será más amiga del silencio, ahora está llegando a su máximo del ruido, en donde nosotros mismos no podemos escucharnos.

Nosotros los adultos, podemos practicar el mauni todo un día, o toda una mañana. Puedes sonreir, leer, escribir muy poco, hacer señales, pero no puedes, cantar, enojarte, ni ver televisión, menos chatear, apaga el celular por supuesto.

Poner sobre aviso a tu familia que lo estas practicando, ellos colaborarán sin duda, a todos nos gusta que el otro u otra este mudo.

Una excelente práctica es hacerlo por uno 3 o más días. Los niños serán los más beneficiados con el tiempo. Puedes explicarles los auténticos principios del mauni

No hay comentarios:

Publicar un comentario